Desde que empezó la cuarentena, me he dado cuenta que mi gata se comporta de una forma algo extraña. Maúlla para llamar la atención más a menudo, nos sigue y se pega más a nosotros (como si buscará nuestro calor), y creo que se deja más comida que de costumbre, pero no mucha. Si bien es cierto que ya era cariñosa y charlatana, tengo la sensación de que actúa de manera rara. Además, hace un par días descubrí que tenía la mitad baja de la tripa y un poco la parte interior de las patas traseras sin pelo, como si se los hubieran arrancado.
Busqué en Internet el motivo de semejante calva, y como no tiene costras (de tiña) o marcas que pudieran dar a entender que es producto de una reacción alérgica, así que la causa que más me cuadra es que esté estresada, debido al cambio de la rutina por el estado de alerta (ya que somos dos en casa y ambas no solemos pasar tantísimo tiempo en casa como lo hacemos ahora). Aunque sigue saliendo a pasear, se la ve con energía, y come (menos lo poquito que se deja que puede ser porque ya se cansó de la gelatina esta), pero eso podría explicar su comportamiento meloso, pero no lo sé.
Podría no ser nada y tener otra explicación, y eso espero porque en nuestro caso nos resultaría complicado llevarla al veterinario, pero me gustaría ver si alguien podría opinar, o contar si le ha pasado algo parecido y como arreglarlo. ¡Gracias!