Dedico este poema a la gatita que se murio el 16 octubre 2015 era mi ángel peludo.
En tu figura felina aprendí que la soledad puede ser compartida que el sentimiento
de humano también pueden surgir de los maullidos de los peludos gatos, de tú ronroneo
que fué mi aliento. Dame tu fuerza salvaje, la que heredaste de tus ancestros, a saltar
desde tejados sombríos y si caigo que pueda como tú mantener el equílibrio, que mi maullido
sea de gozo y no el grito de los que estan perdidos.En tu mirada observé la paz y como
viviste con dignidad la que yo perdí hace tiempo, la paz que quise negociar y nunca encontré
mi libertad. Llevamé contigo a trepar por el cielo y descansar un rato en el silencio ya que
las palabras no tienen significado.Apoyarme en tu lomo,acercar mi cabeza a tu peludo rostro
llorar a tu lado,mi querido animal felino gato y enseñame a escapar y a esconderme en la
ciudad,tener libertad y no necesitar nada material,aprovechar como tú la oportunidad del
presente y agazaparme en un mullido rincón y sentir que soy yo. Con las garras de tus patas
escribiste la historia de este humano que te ama. Mi kuini te quiero!