Generalmente decimos que los gatos son animales de hábitos y rutinas, y que éstos son poco propensos a cambiar de aires o de entornos. Por ello lo de viajar con nuestras mascotas de vacaciones es algo que normalmente nadie aconseja.

Pero entre tanta necesidad por una vida sin cambios hay un selecto grupo de razas que son más aptos a amoldarse a los cambios. Y es precisamente de éstos de los que hablaremos.

En el siguiente artículo analizaremos las cuatro razas de gatos más adecuadas para aquellos que llevéis un estilo de vida con muchos cambios, pero que aún así sintáis la necesidad de poner un gato en vuestras vidas. Conozcamos a esas razas que están más preparadas para acompañarnos en los cambios.

Lo primero que quiero contaros es que la principal característica para considerar que un gato es apto para viajar es la capacidad de éste de adaptarse correctamente a las nuevas situaciones. Un gato confiado, seguro y relajado es más versátil a la hora de tolerar los cambios.

Y comenzaremos con la raza de gatos Scottish Fold, cuyo carácter amable, cariñoso y la sangre fría que éste presenta lo hacen apto para amoldarse mejor a los cambios, lo que lo convierte en un compañero de viaje ideal. Además se lleva muy bien con otros animales, y es igualmente sociable con los humanos, así que da pocos problemas.

La raza de gatos Chartreux es otra de las apropiadas para viajar con ellos. Los que tienen Chartreux en casa ya saben lo bien que se adaptan éstos a las nuevas situaciones. Además son muy sociables, llevándose bien con otros animales, con niños y con todo lo que les rodea en general. Por ello (y por su gran tamaño) estos gatos son conocidos como “gigantes amables”.

Seguimos con una nueva raza de gatos aptos para cambiar de entorno. En este caso hablamos del Bobtail japonés. Los gatos de esta raza son animales confiados, inteligentes y llenos de energía, características que les permiten adaptarse a cambios sin grandes traumas. Igualmente se adaptan bien a nuevas compañías, como otras mascotas, niños en casa, etc.

Y por último terminaremos con la raza de gatos Pixie Bob. Ésta puede sorprenderte porque parecen los más salvajes, pero generalmente son animales que hacen lazos muy estrechos con sus familias y que no presentan grandes problemas para viajar en coche. De hecho son animales a los que les gusta incluso pasear con correa y juguetear con todo. Muchos definen a esta raza como “gatos con carácter de perro”.

Pues éstas son las cuatro razas que creemos más apropiadas para viajar con ellas. Por supuesto todo esto dependerá igualmente de la socialización que haya recibido el animal desde cachorro y de las costumbres que hayamos inculcado en él. Pero si quieres un gato que pueda acompañarte de viaje, alguna de estas cuatro razas podría ser la ideal.