Son varios los problemas que podemos llegar a tener con un gato como mascota. Uno de ellos es el problema del síndrome del gato paracaidista. Veamos en que consiste, como reaccionar ante él y como evitarlo.

Este síndrome se refiere a los incidentes en los cuales se pueden ver inmersos nuestros gatos y ponen en riesgo su integridad. Se llama “gato paracaidista” a aquel que ha tenido problemas con su equilibrio o atención y debido a ello ha caído o puede caer de medianas o grandes alturas.

Un ejemplo de esto me pasó personalmente hace un tiempo con mi gata. Estaba viviendo en un cuarto piso. Hacía bastante calor y por eso las ventanas estaban abiertas. Mi gata era solo una pequeña de seis meses que se divertía atrapando los insectos que entraban en ocasiones por la ventana.

Una tarde de esas mientras veíamos la tele un bicho entró por la ventana del salón y la gata que estaba sobre una mesa cerca de la ventana se lanzó hacia él sin prever que la pérdida del equilibrio la haría caer por la ventana.

Afortunadamente en esa ocasión no hubo problemas de fracturas, pero sí sintió mucho dolor. En otros casos mucho más graves el animal puede sufrir daños internos y puede morir por una caída inesperada.

Consecuencias del síndrome del paracaidista

Si bien en mi caso una revisión con el veterinario y analgésicos fue suficiente, muchos otros gatos no corren la misma suerte.

Dependiendo de la altura, fuerza de la caída y reacción del gato se pueden presentar daños corporales diferentes como fracturas de huesos, heridas en la piel, problemas cerebrales y hasta la muerte por daños internos graves.

Estos daños también dependen de la zona en la que caiga nuestro gato. Si cae en superficies blandas como el césped, por ejemplo, el daño será menos traumático que si cae en cemento.

Dentro de las lesiones que se pueden presentar frecuentemente debido a este síndrome encontramos las fracturas en las zonas de fémur, rotura de huesillos en la región de la mandíbula u otros huesos frágiles.

En los daños del cuerpo que se pueden presentar encontramos lesiones en la vejiga y también en los pulmones.

Puede pasar que nuestro gato no presente lesiones visibles, pero no por ello debemos descartar cualquier problema. En caso de caída lo mejor es consultar al veterinario para hacer una buena revisión y descartar daños graves o fracturas.

¿Cómo combatir el síndrome del gato paracaidista?

Para combatir este problema el paso fundamental es realizar una tarea de prevención. En el caso de continuar viviendo en sitios altos lo mejor es usar mallas para las ventanas que eviten la caída de nuestro gato.

Estas protecciones pueden ser ubicadas también en zonas como balcones. Podemos encontrarlas en tiendas especializadas o podemos fabricarlas nosotros mismos. En cualquier caso lo que tenemos que intentar es mantener alejadas a nuestras mascotas del peligro para así cuidar su integridad.

Si bien muy pocas veces se repiten estas situaciones traumáticas en un mismo gato, no es imposible que después de una caída vuelva a haber otra.