Ante todo me estreno en este foro con una pequeña historia, una historia felina de vida...

Hace unos 7 años atras un chico (no tan chico..grandesito de unos 30 años...) tenia un concepto de lo gatos no muy agradable, los veia como animales de la calle que iban a su aire y a sus intereses, transmisores de enfermedades..en fin con todos los prejuicios que muchas personas tienen sobre estos animalitos. La cuestión es que el chico se casa y como los casados casa quieren se muda a un townhouse con su pareja, donde ademas de vivir ellos conviven unos pequeños e inteligentes roedores que no logran exterminar con nada.

Un dia de visita la cuñada trae un pequeño "despojo peludo" (como lo llamaba el chico) que resulta ser una gatita de unas dos semanas de nacida, que se habian conseguido en la carretera, llena de pulgas, con una parasitosis importante y temblando. El chico por complacer a su chica, salen a comprar desparasitantes, vitaminas, suero y una camita para esa indeseable visita.

La cuestión es que la pequeña gatita balinesa de ojos azules se salva contra los pronosticos de dos veterinarios que la habian observado cuando van a comprar las cosas ese primer dia. La gatita va creciendo con los cuidados de ambos. El chico con las semanas va viendo como la gata se torna cariñosa, descubre como hacerla ronronear y a jugar con ella.

Se sorprende cuando descubre que los gatos son muy aseados y solo hacen sus necesidades en su caja de arena asi mismo casi se queda de una pieza cuando al gritar el nombre la gata se viene corriendo desde donde esta escondida hasta él.

Con los meses a la gatita le viene su primer celo y la chica busca un hermoso gato maine coon para que hagan pareja. La gatita queda embarazada del gato y a la mitad el embarazo, el unico sitio donde quiere estar es dentro de la gaveta de una mesilla de noche que esta al lado del chico. No habia fuerza que la detuviera a estar determinada a echarse alli, sacaba la gaveta si estaba adentro y despues de sacar todo se tiraba adentro. Viendo esto la dejaron estar alli para que estuviese a gusto. Un noche se acuestan a dormir junto con la gatita (en su gaveta) y temprano en la mañana la sorpresa del chico es mayuscula cuando la gata lo despierta encima de la cama donde ha colocado al lado de su almohada 6 pequeñas crias para que él las viera, enternecido por esta vista corren dos gruesos goterones por sus cachetes.

Sus prejucios caen uno por uno en un instante, la gatita y el se hacen inseparables.

El chico de la historia soy yo    y la chica mi esposa. La gata se llama gata Chuchi y junto con una de sus hijitas (negrita) de esta primera y unica camada (despues fue esterilizada)vive con nosotros. Para nuestra familia las gatas son parte integral de la misma, en pocas palabras son como una hijas peluditas. Cuando llego a casa lo primero que hago es llamarlas y jugar, duermen, cocinan, se bañan y comen con nosotros.El cariño y el amor que recibimos de ellas no tienen precio.

Saludos

LD