Hola, a pesar de que la situación con los gatos del campo está difícil, el sábado cuando sacaba a la perra fuera de la casa escuché un "miau" muy extraño, pensé que sería de un gato de fuera del campo, pero no, no era de fuera, era de dentro y no se como llegó a entrar, solo hace falta saltar un pequeño muro de menos de un metro que separa la carretera del campo, pero el gatito estaba en tan malas condiciones que me extrañó que hubiera realizado ese salto. Cuando observé al gato tenía en su cuello un bulto del tamaño de un tomate y con no muy buena pinta.
Lo único que pensé es que esto era lo que nos faltaba, no sabíamos donde meter a unos cuantos gatos y encima ahora otro más. Pero claro, estaba muy mal y no podíamos dejarlo sufrir, así que mi pareja lo llevó al veterinario para que, al menos, tuviera una muerte digna, ya que creíamos que era cuestión horas.
Al final el veterinario nos dijo que podía salvarse, que ese bulto era una infección de órdago que le había hecho un gato o un perro, además de estar deshidratado, falta de vitaminas, infección pulmonar... le pusieron un drenaje para que fuera saliendo toda la porquería que tenía metida dentro del cuello y unas cuantas cosas más. Era el destino, otro mas que no sabemos que será de el, ya que ya no podemos contar ni siquiera con el campo.
Richi, tiene dos meses y es una especie de siamés de color beige y marrón, con unos lindos ojos azules y cariñoso al máximo. No hemos podido abandonarlo a su suerte, pero necesita casa urgentemente ya si no tendrá que vivir fuera de la casa y no creo que lo superara.
Además de fotos dejo dos enlaces de videos (no muy buenos) de Richi.
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