Hay una carta para ti ……
Hola a todos, soy Kimba y hoy quiero ser yo quien me dirija a vosotros para agradeceros, que en estos meses tan especiales y difíciles para mí, hayáis formado parte de mi vida y no hayáis consentido que pase al olvido. Dicen que soy un gato muy valiente, que no me he rendido y que lucho como un jabato, pero sería injusto llevarme yo solo el mérito y por eso hoy estoy aquí, porque quiero agradecer a todos los que estáis en la sombra la ayuda que me estáis brindando.
Jamás pensé, que desde aquel día que Cristina me recogió de la calle, iba a vivir todo lo que he recorrido, aunque recordando como me encontró y como estoy ahora, cada paso que hemos dado juntos, por duro que sea, ha merecido la pena. Reconozco que no fue fácil vivir en un cuarto de baño. Al principio fue mi pequeño refugio, era casi un alivio estar entre esas cuatro paredes lejos de los peligros de la calle en la que no estaba acostumbrado a vivir ni buscar alimento. Al menos allí dentro había comida y Cristina curaba mis heridas, pero poco a poco, aquellas cuatro paredes se me iban echando encima y empezaron a asfixiarme y para empeorar la situación, el nulo ejercicio añadido al estrés, descontrolaban mi diabetes. Además, empecé a sentirme muy deprimido y reconozco…. que empecé a rendirme, porque una de sus gatas no me aceptaba y todo apuntaba a que yo no iba a poder salir nunca del cuarto de baño, pero justo a tiempo llegó un soplo de aire fresco que me dio el empujón que necesitaba en el momento justo.
Este maravilloso soplo de aire fresco se llama Yolanda. Ella se brindó a tenerme de acogida en su casa de Lunes a Jueves, ella pensaba que no era mucho lo que podía ofrecerme, sin embargo, para mí fue algo inmenso…. . Allí en su casa podía tener toda una buhardilla en la que jugar y corretear para mí solo, me sentía como un chiquillo al que llevaban de excursión y aunque el viernes tenía que regresar refunfuñando de nuevo al cuarto de baño, los lunes me devolvían la vida cuando volvía con ella.
Pero esta alegría, tenía fecha de caducidad, la llegada del verano hacían de la buhardilla un lugar inhabitable por qué no estaba acondicionada y se convertía en un auténtico horno, era imposible que me quedara a vivir allí….. y cuando todo parecía ponerse de nuevo en mi contra … aparecieron Mirian y Jose , que se ofrecieron como nueva casa de acogida y ahora vivo con ellos en una buhardilla en la Sierra de Madrid. Ellos tienen otros gatos en casa que son negativos en inmuno y tengo que estar separado, pero me dedican todo el tiempo que pueden y yo me siento taaaaan feliz , que incluso cuando estoy solo, juego con mi pelota cascabel para que puedan oírme desde abajo y no se olviden, que yo estoy aquí arriba esperando.
Ahora mi estado de salud es completamente diferente. El glaucoma de mi ojo ha mejorado muchísimo y la diabetes está muy controlada , tan solo me tienen que pinchar una vez al día dos unidades. La verdad es que la veterinaria dice que es pronto para hacerse ilusiones y que esta situación puede cambiar en cualquier momento, pero la realidad es que desde que hago ejercicio y he vuelto a ser feliz mis analíticas han mejorado sorprendentemente, ¡es como si hubieran sacado sangre a otro gato en vez de a mí¡.
Esta carta la escribo con ayuda de un humano, pero os aseguro , que cada sílaba se escribe con tinta de mi corazón y podríais leer esta carta reflejada en mis ojos. Ahora, sigo buscando un hogar, alguien que no tenga gatos ó que sean positivos en inmuno y pueda formar parte de su clan definitivamente.
Me despido de vosotros dejando presente en esta carta el mejor de mis ronroneos y agradeciendo a todo el mundo que nos ha escrito preocupándose por mí ó buscando una familia en mi nombre difundiendo mi historia. Gracias a todos los que estáis a mi lado y me acompañáis en este camino hacia mi nueva vida.
Para poneros en contacto conmigo: Tlfno: 625 89 77 16 / kinacristi@hotmail.com